El Gobierno de Aragón ha anunciado que toda la comunidad pasará al nivel 3 de alerta establecido en el decreto ley aprobado esta misma semana ante la preocupante subida de contagios por coronavirus. El ejecutivo ha tomado la decisión frente a la gran subida de casos que se registró ayer, la mayor subida de casos registrada desde que comenzó la pandemia.
Este nuevo nivel de alerta establece aforos generales al 25% excepto en los establecimientos de abastecimiento alimenticio, que seguirán al 50%. En el caso de los bares, solamente podrán tener operativas las terrazas a un 50% con la prohibición de consumir en los interiores. Además, quedan suspendidos los eventos deportivos no profesionales, cerrados los centros recreativos, juveniles, y en entierros, velatorios, bodas y demás solo podrá haber un máximo de 15 personas en exteriores, y 10 en interiores. El transporte público se ha anunciado que se mantendrá en las mismas medidas que las que seguía hasta el día de hoy. Todas estas medidas entrarán en vigor a partir del próximo lunes 26 de octubre.
El presidente aragonés, Javier Lambán, ha comparecido junto a la consejera de sanidad, Sira Repollés, para anunciar estas nuevas medidas, y además, el confinamiento perimetral de las ciudades de Zaragoza, Huesca y Teruel. Las tres capitales de provincia aragonesas tendrán restringido el acceso a partir de esta media noche.
Este confinamiento supone que no se podrá acceder a las tres ciudades a no ser que se tengan unas causas justificadas, como volver a la residencia, acudir a citas médicas, cuestiones laborales o empresariales, cuidado de menores o mayores, dependientes y demás, y por cuestiones de fuerza mayor.
Repollés ha comentado que actualmente solamente los sectores sanitarios de Calatayud y de Alcañiz tienen una incidencia inferior de 500 por cada 100.000 habitantes, y que solamente 1 de cada 2 zonas de salud básica de la comunidad tienen una incidencia inferior a 500 por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días.
